El tamaño ideal para una taza de café es de 200-300 ml, mientras que el de una taza de té es de 100-200 ml.
Los materiales más recomendados para tazas de café y té son la porcelana, la cerámica y el vidrio templado.
Las tazas de té suelen ser más pequeñas y con asas más pequeñas y las tazas de café son más grandes y tienen asas más grandes.
En la descripción del producto o en su etiquetado se indicará si es apta para lavavajillas y/o microondas.
Las asas en forma de C y las asas ergonómicas son las más cómodas para sostener una taza de café o té.
Las tazas con tapa y las tazas con sistema antigoteo son ideales para evitar derrames al servir.
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